Tips y consejos de belleza

Mañana estás invitada a una fiesta y deseas causar sensación. Una forma de hacerlo es mediante un buen escote. Sin embargo, no se trata de un escote que deje ver de más sino, por el contrario, uno que sea atractivo sin dejar de ser elegante.

El primer paso para atraer miradas con un buen escote consiste en cuidar la piel de esta área del cuerpo, muy propensa a arrugas, impurezas, estrías y espinillas, y a daños por el paso del tiempo, los cambios hormonales, el peso y el clima, entre otros factores.

No esperes a que las feas manchas o la flacidez invadan tu escole para combatirlas, por eso hidrata bien esa zona, protégela del sol y emplea tratamientos reafirmantes con estimulación muscular para recuperar la elasticidad de los músculos y de la piel. Haz de esto una rutina de belleza para mantener tu atractivo.

Además, exfolia la piel del escote con mascarillas suaves. La de leche mezclada con granitos de sal es ideal. Aplícala con algodón y luego de retirar las células muertas, lava con agua fría. Usa crema natural nutritiva una vez por semana, otra con protector solar para el día y un humectante ¡puede ser el que usas para el rostro!, para la noche.

Es importante recordar que el escote no puede ser usado en cualquier ocasión. Por ejemplo, resulta inapropiado para ir a trabajar porque resta profesionalismo y denota baja autoestima o segundas intenciones. 

El escote se usa en actividades sociales y, en este sentido, lo aconsejable es que no se vea la linea que marea el inicio entre los senos.

En cuanto a qué tipo de escote favorece más, se recomienda:

El Halter (que se abrocha en la nuca y deja al descubierto espalda, hombros y brazos) hace disimular bustos muy grande.

Un escote recto beneficia, también, a las mujeres con mucho busto, pero siempre se debe verificar que éste no haga que el busto se vea muy apretado o levantado.

Un escote corazón para las que tienen poco busto y para las mujeres con poca cintura y caderas anchas, el escote cuadrado o francés.

El escote redondo es discreto, cómodo y juvenil con una curva muy cerrada que puede llegar hasta el principio del busto o algo más arriba.

Recuerda que el escote puede resultar un "arma de doble filo", de allí la importancia de aprender a usar aquél que más nos favorecen, incluso por encima de los propios gustos v la moda.